Género: Lemon
Pareja: Seguiré sin decirlo, por si alguien no se lo ha leído
Capítulos: 7/¿? (sigo pensando que pocos XD)
Comentarios: Esta vez he actualizado pronto~~ fiestaa!!! Y... ya está, espero que os guste el capítulo :3
Llegó a casa y tiro la bolsa con la ropa encima del sofá, y se fue hacia la su habitación, de camino recibió una llamada al teléfono, miró el remitente y era de un amigo con el que solía salir a tomar algunas copas, pero lo puso en silencio y volvió a guardarlo en el bolsillo, no le apetecía salir, ni beber, ni conocer a nadie, ni acostarse con nadie, ni nada. Solo dormir y esperar a que el día siguiente no se estuviera de ese humor.
Al menos mañana tenía el día libre para descansar…
*** ***
Inoo se rindió y abrió los ojos pesadamente, había perdido la batalla contra su móvil. Aunque la noche anterior lo había puesto en silencio, seguía en modo vibrador, y al tenerlo encima de la mesita de noche hacía mucho ruido, al menos el suficiente como para despertar a Inoo y desesperarlo.
Cogió el teléfono y dudó durante unos instantes en si lo tiraba o no por la ventana, pero luego decidió que era un objeto demasiado caro y contestó al teléfono.
- ¡Hola! – oyó al otro lado de la línea identificando al momento de quien provenía la voz.
- M… ¿Qué quieres Takaki?...
- ¿Estabas durmiendo?
- Sí – fue lo único que dijo
- Pues buenos días, ya son casi las tres de la tarde.
- ¿Las tres? – preguntó sorprendido
- ¿Qué hora te pensabas que era?
- No sé, pero pronto, tengo sueño…
- ¿Saliste ayer?
- ¿No puedo tener sueño sin haber salido? –Oyó a Takaki reírse - ¿Y porque llamabas?
- Es que había pensado en ir al cine con unos amigos… ¿Te gustaría venir?
- Mientras no sea de miedo la película…
- ¡Vale! Nos vemos en una hora y media en el cine.
- Hasta ahora.
En cuando colgó se levantó pesadamente de la cama y se fue a la ducha directamente, cuando hubo acabado se vistió y entonces recibió una llamada de Takaki en que se ofrecía a pasarlo a buscar en coche, Inoo aceptó y bajó a la calle a esperar a su amigo.
Pronto vio llegar el coche plateado de Takaki y se subió en él. Durante el viaje ambos permanecieron en silencio. No les molestaba en absoluto, cuando no tenían nada que decirse simplemente no decían nada, no se creaba ningún ambiente tenso.
En menos de cinco minutos llegaron al centro comercial donde estaba el cine, allí les esperaba Chinen supuestamente con sus amigos. Pero en vez en encontrarse a varia gente Inoo solo vio a Daiki junto al novio de Takaki.
Miró con odio hacia Takaki, sabía que algo le había pasado con Daiki y ni siquiera se había molestado en avisarle de que Daiki también iba al cine. Si lo hubiera sabido no habría ido. No le apetecía ver al menor, ya que eso suponía sentirse mal y culpable otra vez, suficiente tuvo el día anterior.
- ¿Qué ocurre? – preguntó Takaki haciendo ver que no sabía que le ocurría.
- Cre-creo que he olvidado algo que tenía que hacer, mejor me voy – dijo Inoo torpemente.
- No seas tonto, ¿es porque Daiki está aquí? – dijo mientras lo sujetaba del brazo para que no se fuera.
- Si lo sabes, ¿Por qué me has traído? – dijo esta vez molesto.
- Por que no se que es lo que ha pasado, pero los dos sois personas adultas y debéis resolver vuestros problemas.
- ¡Takaki! – Exclamó Chinen cuando se encontraban a pocos metros.
Inoo suspiró al ver que no tenía escapatoria, ya lo había visto y ahora no podía huir.
- Hola Inoo – le dijo Chinen con una sonrisa.
- Hola – le devolvió el saludo. Miró de reojo a Daiki pero como él no le dijo nada, decidió no saludarlo.
- Bueno pues ya estamos todos, ¿vamos? – dijo mientras cogía a Takaki por el brazo - ¡Ah! Tomad vuestras entradas. Van numeradas.
- ¿La morada del mal? – Leyó Inoo en voz alta - ¿Qué no me habías dicho que no sería de miedo?
- ¿Te dan miedo? – dijo inocentemente Chinen – Es que yo no lo sabía. Bueno, como estás sentado entre Takaki y Daiki, no te preocupes, ellos te protegerán.
- Pero si Daiki siempre tiene más miedo que yo…- susurró antes de andar detrás de sus amigos.
Daiki, por otro lado se había quedado estático en la entrada al cine. No se esperaba encontrarse a Inoo allí y menos que lo ignorara de la forma en que lo había hecho, siempre era el primero al que saludaba. Se quedó dudando en si debía irse a casa, aún que estaba a tiempo.
Después de lo había pasado el día anterior lo que menos le apetecía era ver a Inoo, debía olvidarlo, lo sabía y lo entendía. Inoo no sentía nada por él, y la decisión del mayor al saber que le gustaba había sido el dejar de tener cualquier tipo de relación sexual. Eso aunque no lo compartía debía aceptarlo, pero al menos le hubiera gustado que la forma en que lo tratase fuera la más parecida a la de antes de que Inoo supiera sus sentimientos.
- ¿No vienes? – dijo Inoo sacándole de sus pensamientos al ver que se había quedado quieto.
- ¿No te importa? – preguntó preocupado por la respuesta.
- Claro que no. Daiki no seas tonto… que yo…
- Está bien – dijo cortándolo. Sabía el resto de la frase y no le apetecía oírla. “ser amigos como siempre” sabía que Inoo iba a decirle eso, y aunque no le gustaba, prefería tenerlo como amigo que nada.
Pasó a Inoo de largo y se puso al lado de Chinen, si Inoo iba a ignorarlo él también lo haría, o al menos lo intentaría.
Se sentaron según el orden de los tickets de entrada, de izquierda a derecha estaban Daiki, Inoo, Takaki y Chinen.
La película empezó normal, una familia que se mudaba a una casa nueva, pero como en todas las películas de miedo llegó la noche y con ella empezaron los sustos.
Al principio Inoo optó por cerrar los ojos cada vez que la escena prometía algo de miedo, en este caso, terror para Inoo. Pero al cabo de un rato, y al ver que la táctica no funcionaba decidió taparse con el cubo de palomitas. En menos de cinco segundos las palomitas cayeron al suelo del miedo que le dio la chica que salía de la bañera en película.
- ¿Estás bien? – le preguntó Daiki preocupado al ver las reacciones de su amigo.
- ¡Claro que no! Yo dije que no quería ver ninguna película de miedo…
- Dame la mano – le cortó Daiki antes de que Inoo pudiera seguir quejándose.
Estaba molesto por la forma en que se había comportado Inoo con él, pero le sabía mal que lo estuviera pasando tan mal… él sabía, mejor que nadie, cuanto odiaba el mayor las películas de miedo.
- ¿Tu no tienes miedo? – preguntó Inoo curioso.
- No tanto como para tirar las palomitas al suelo.
- ¡Sh! – les dijo la persona de atrás.
Inoo ignoró el último comentario de Daiki y decidió darle la mano mientras miraba directamente a la pantalla.
Gran error para Daiki, en menos de diez minutos ya no se notaba la mano de lo fuerte que le apretaba Inoo. Y aunque en un principio no le importase mucho, ya que su querido Inoo le daba la mano, al final tuvo que sobreponer la razón al sentimiento y soltarle la mano para dejar que la sangre fluyera hasta la punta de los dedos.
Inoo, que se vio sin nada a lo que sujetarse, y sin pensárselo mucho cogió su bebida para apretarla y evitar chillar, sin contar que su fuerza era mayor que la del papel que contenía el líquido de su té frío y con el primer susto dobló el vaso de papel vertiendo todo el contenido sobre sus pantalones.
- ¡Mierda! – exclamó al notar todos los pantalones mojados.
- ¿Qué estás haciendo? –dijo Daiki.
- Para hablar iros a una cafetería – dijo molesto el mismo chico que antes les había echo callar.
Inoo se levantó molesto y decidió ir al baño. Ya tenía suficiente con haberse mojado como para soportar al chico de atrás, que no tenía ni un poco de paciencia.
Cuando se levantó Chinen y Takaki se giraron sin acabar de entender que era lo que había ocurrido, al no encontrar respuesta miraron a Daiki, pero éste solo negó con la cabeza y decidió seguir a Inoo haciendo un movimiento antes para decirles a Takaki y Chinen que se quedaran allí.
Salió de la sala y miró a ambos lados, ¿dónde se suponía que había ido? Decidió al azar que ir hacia la derecha, así que fue hasta el final del pasillo y giró la esquina pero solo se encontró con más salas donde estaban proyectando varias películas así que decidió volver sobre sus pasos e ir hacia la otra dirección.
Allí por fin encontró el baño, entró sin pensar.
- Inoo, ¿estás aquí?
- Hola – le contestó él sin mirarlo.
- ¿Qué haces así? – preguntó sorprendido al encontrarse a Inoo en ropa interior.
- Lavo un poco los pantalones, no quiero ir apestando a té toda la tarde, además ya están mojados.
- Ya, y como entre alguien… - dijo flojito divertido mientras se cruzaba de brazos y se apoyaba en la pared mientras esperaba a que Inoo acabase.
- Todos somos hombres, eso da igual.
Inoo terminó de lavar los pantalones y se dirigió al secador que colgaba de la pared para intentar secar un poco los pantalones bajo la atenta mirada de Daiki.
- ¿No vas a mirar la película? – preguntó Inoo un poco nervioso, la mirada de Daiki era una de las pocas cosas que llegaban a intimidarlo.
- No me entusiasman demasiado las películas de miedo.
- ¿Y porque has venido?
- No tenía nada mejor que hacer, pero es más divertido ver como intentas secar los pantalones.
- ¿Tan divertido es?
- No, pero así no se van a secar mucho
- ¿Des de cuando eres un experto secando pantalones? – preguntó con una sonrisa Inoo.
Daiki solo le devolvió la sonrisa y se acercó a Inoo lentamente. Se colocó detrás suyo y cogió los pantalones rozando las manos de Inoo adrede.
- Si tensas la ropa se secará antes, no hace falta ser un experto para saber eso. – dijo sobre el cuello de Inoo provocando un escalofrío por toda la espalda del mayor.
Inoo sabía perfectamente lo que se proponía Daiki, no por algo llevaban mucho tiempo como amantes. En su cabeza pasó la idea de alejarlo, entre otras cosas porque estaban en los baños de un cine, pero los besos que empezaba a darle Daiki por el cuello le hacían sentirse demasiado bien. No llevaban ni dos días sin acostarse y ya los echaba de menos.
Cerró los ojos y se dedicó a disfrutar, pronto Daiki ya le estaba pasando una de sus manos por debajo de la camiseta, haciendo que Inoo soltara algún que otro suspiro.
Daiki lo fue girando poco a poco hasta que quedaron encarados, se miraron un momento y Daiki se puso de puntillas para llegar mejor hasta los labios del mayor, pero justo cuando iban a besarse, el móvil que estaba sobre la pica del baño empezó a sonar provocando que Inoo se girara para mirarlo evitando el roce de labios.
Miró a la pantalla que estaba iluminada y ponía en grande “Llamada entrante Yabu”. Daiki estuvo esperando de puntillas a que Inoo se girara y acabara lo que él mismo había empezado, pero eso no ocurrió.
- ¿Lo vas a coger? – preguntó un poco triste, Inoo nunca cogía su teléfono mientras estaban “ocupados”.
- Si – se limitó a contestar él. Pero no se movió.
Daiki cansado de escuchar la musiquita, se acercó a coger el móvil y se lo pasó a Inoo, mirando de reojo quién era el que lo estaba llamando. Su nerviosismo aumentó al ver que era Yabu.
- ¿Hola? – dijo Inoo.
- Hola soy Yabu – dijeron al otro lado del teléfono.
- Lo sé, tu nombre sale en la pantalla.
- Ui que genio… - bromeó Yabu – ¿que estabas a mitad de una tarea?
- No – dijo Inoo, aunque por el tono en que lo dijo Yabu supo perfectamente que mentía.
- Vaya, ¿y con quién? Si se puede saber…
- Ahora mismo estoy en el cine con Daiki.
- Ajá…
- ¿Qué quieres? – preguntó Inoo curioso, cuando Yabu le llamaba no solía sacar temas de conversación, iba directo al tema que quería, al fin y al cabo, por algo le había llamado.
- Te llamaba para preguntarte que es lo que había pasado entre tú y Daiki, ayer estabais raros, pero ya veo que lo habéis solucionado.
- …
- Bueno, pues ya está cuelgo y os dejo seguir con lo vuestro.
- ¡Espera! – exclamó Inoo perdiendo los nervios. Sabía perfectamente que si Yabu colgaba acabaría haciéndolo con Daiki.
- Dime
- E-estamos con Chinen y Takaki también…
- ¿Dónde están?
- En la sala, yo he tenido que salir porque se me ha caído el té encima… aunque ese no es el caso.
- ¿Qué te pasa?
- Nada. – dijo Inoo mirando a Daiki que lo miraba atentamente – Había pensado en que podíamos salir todos de fiesta un rato, esta noche.
- ¿Esta noche? ¡Genial! Se lo diré a los demás también.
- Vale.
- ¿Cuelgo?
- Eh…
- Inoo, no sé lo que pasa, pero soluciónalo.
- Pero no…
- Tú solo – remarcó – Hasta esta noche - y colgó sin dejar que Inoo pudiese decir nada más.
Inoo se apartó del teléfono lentamente, “vaya amigo” pensó. Cuando lo necesitaba lo dejaba… miró a Daiki que seguía de pie observándolo en silencio. No sabía lo que hacer o decir, así que optó por ponerse los pantalones aunque seguían medio mojados, ya se secarían. Lo único que quería hacer era salir de allí lo antes posible, o caería en la tentación…
- ¿Qué quería? – preguntó Daiki curioso. Aunque había escuchado toda la conversación de Inoo, no sabía lo que le había dicho el líder. Y quería saberlo.
- Nada, Yabu se aburría.
- ¿Solo eso? – preguntó no muy convencido de la respuesta de Inoo.
Inoo afirmó con la cabeza y decidió que la conversación se había acabado. Se giró y de fue hacia la puerta, pero no pudo avanzar mucho, porque Daiki lo detuvo a medio camino.
- ¿Dónde vas? – dijo poco a poco mientras se acercaba otra vez lentamente - ¿No prefieres terminar lo de antes?
- Daiki estamos en el cine – dijo apartándose de golpe mientras se intentaba controlar, si fuera por él y sus hormonas, Daiki ya estaría empotrado contra la pared, pero no debía hacer eso…
- Eso nunca te ha importado – insistió Daiki.
- Pues ahora sí – le cortó Inoo andando rápidamente hacia la puerta y saliendo por fin del baño.
Sabía perfectamente que estaba huyendo de Daiki, pero no entendía como le costaba tanto resistirse al menor.
- ¡Inoo! – oyó a Takaki. Inoo levantó la mirada y se lo encontró a pocos pasos con Chinen al lado. – La película ya ha acabado. ¿Y Daiki? – añadió al ver que éste no estaba con él.
- Estoy aquí – dijo saliendo del baño.
- Perfecto ya estamos todos. – dijo Chinen – ¿Queréis que vayamos a cenar?
- Me parece bien, - dijo Inoo- con Yabu hemos dicho de ir luego a tomar algo, ¿os apuntáis?
Chinen y Takaki se miraron y luego afirmaron a la vez con una sonrisa.
- ¿Tu también vienes Daiki? – preguntó Chinen.
- No sé, no creo…
- Pero Dai, si no estamos todos no será divertido – insistió Chinen ojitos de cachorro.
- Está bien… - dijo rascándose la cabeza.
Inoo no supo exactamente porque pero se alegró al oír eso. Se giró para sonríele, pero cuando lo hizo, en vez de recibir una sonrisa, Daiki le giró la cara y volvió a hablar con Chinen, para discutir dónde podían ir a cenar.
Inoo sabía que se merecía esa actitud por parte de Daiki, sabía que al menor le gustaba y el estaba todos los días con el “ahora quiero acostarme contigo, ahora no” pero eso no significara que no le doliera.
CONTINUARÁ...
waaaaa quiero contiii >w< ahotra inoochi se hace el dificil
ResponderEliminarestupenda conti Inuyka!!!...pobre dai...dando lo mejor de si e Ino que lo rechaza solo por miedo...xD!!!...oajal y en esa reunion que tendran se arregle aunque sea un poco su situacion...^^
ResponderEliminary el takachiii...wuauuu super tierno...n_n!!
Waa pobre Daiki...lo dejaron en el baño jajaja
ResponderEliminarque pasara en esa reunión??? :O
Solo te dire que ME ENCANTA COMO ESCRIBES de verdad siempre me dejas con ganas de leer mas =)
ResponderEliminarEsta genial esperare el siguiente cap y porfavor me gustaria mas Takachii, es que me encanta :3
Ja ne
I LOVE JUMP
Exijo continuación ;3; No seas mala ;w;
ResponderEliminarApúrate y sube el próximo capítulo, que Daiki
ahora haga sufrir a Inoo D:! que se vaya adrede con otro -w-
Y que Inoo vea adsdadsaadasdas ok no XD!
waa increible, andaba buscando por ahi un buen fic y me encontre con este , te juro qu eno deje de leer hasta el final me encantoo esta genial, para daiki debe ser dificl, ver a kei y kei aun sabiendo lo que daiki siente waa siento pena por daiki esta increible espeor que lo continues pronto me he vuelto tu fan amo tu fic ♥♥♥♥♥
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